La Cofradía de los Cuatro Santos Evangelistas

HISTORIA DEL NOTARIADO EN MÉXICO

José Rodolfo Chávez de los Ríos y Javier Contreras Arreaga

Publicado originalmente en la Revista Pódium Notarial núm. 45. Colegio de Notarios del Estado de Jalisco
¿Cómo citar este artículo?
Chávez de los Ríos, y Contreras Arreaga (2015, julio 25). La Cofradía de los Cuatro Santos Evangelistas. Podium Notarial. Colegio de Notarios del Estado de Jalisco, 45. Recuperado de https://jurisconducto.wordpress.com/2015/07/25/la-cofradia-de-los-cuatro-santos-evangelistas/

El notariado en México se distingue por la solidaridad que existe entre el gremio de profesionistas que lo conforman. Los Colegios de notarios han ejercido un importante papel en la consolidación de esa unidad y fraternidad, pero ¿De dónde surge la idea de formar un colegio de notarios en nuestro país?

El primero de los vestigios de una colegiación de notarios data del siglo XVI, apenas terminada la conquista, en los albores de la vida Virreinal, y constaba de una forma de mutualidad e incipiente organización profesional, bajo el nombre de la Cofradía de los Cuatro Santos Evangelistas.

Fue en el año de 1573, que se creó la primera organización de escribanos de la Nueva España, con sede primero en el Convento de San Francisco, y después en la capilla dedicada a San Juan Evangelista del Convento de San Agustín de la ciudad de México, bajo el nombre de la Cofradía de los Cuatro Santos Evangelistas, en ejercicio de la licencia del entonces arzobispo de México, Pedro Moya de Contreras. La denominación de la cofradía, se debe a que los evangelistas dieron constancia de la vida y doctrina de Jesús, en el Nuevo Testamento.

El Antiguo Convento de San Agustín hoy alberga la Biblioteca Nacional de México.
El Antiguo Convento de San Agustín hoy alberga la Biblioteca Nacional de México.

El 2 de septiembre de 1573, el virrey Martín Enríquez expide un decreto concediendo la autorización para su funcionamiento. Su finalidad era la de apoyar moral, religiosa y económicamente  sus cófrades en forma de mutualidad. La Cofradía también le imponía una serie de obligaciones a los escribanos, que incluían la asistencia a la fiesta de la Limpia Concepción de Nuestra Señora, San Juan Evangelista, entre otras celebraciones religiosas; Los hermanos debían asistir a todos los entierros de los cófrades y dedicarles un número determinado de rezos; se les exigía una asistencia regular a los cabildos organizados por la mutualidad, al pago de sus cuotas y a buscar solución a posibles conflictos entre los miembros de la Cofradía.

Unos de los beneficios más peculiares que se tienen registrados, fue la concesión de indulgencias a través de algunas bulas papales a los integran-tes de la Cofradía.

Esta Cofradía fue decayendo según palabras de Vázquez Pérez y Monroy Estrada porque  “en 1777 se concediera permiso para admitir dentro de ella a toda clase de personas, con lo que perdió su carácter de exclusiva agrupación de escribanos”.

Sin embargo, esta sirvió de antecedente para formar lo que más tarde, en el año de 1784 se consumaría con la creación del Real Colegio de Escribanos.

indulgencia
Una de las múltiples indulgencias concedidas a los cofrades.

Bibliografía

PÉREZ Fernández del castillo, Bernardo. Historia de la escribanía y del notariado. Editorial Porrúa, 3ª ed. México, 1994, Pág. 218

PÉREZ Fernández del castillo, Bernardo. Breve evolución del notariado en México. Capítulo IV “México Colonial”, México,  Pág. 46

Deja un comentario